Federalismo y centralismo, fueron los dos sistemas políticos de gobierno protagonistas de los primeros años de vida independiente de México. Ambos sistemas, federalismo y centralismo, ideales políticos sostenidos por liberales y conservadores, mantuvieron una lucha en la que México vivió un caos político, social y económico.
Sus enfrentamientos finalizarían hacia 1867, siendo el federalismo republicano el que se impondría como sistema de gobierno definitivo.
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Federalismo
Al federalismo se le define como un sistema gubernativo en el cual el poder no se concentra en un solo ente político, los sujetos que conforman este sistema son parte de este poder, así cada estado o individuo, tiene igual libertad de decisión, derechos y obligaciones en la unión.
México se instauraría como una república federal hasta 1824, estableciendo sus bases mediante la promulgación de la constitución de 1824, esta constitución constituía a México en 19 estados, 4 territorios y un Distrito Federal, todo ello gobernado bajo la división de poderes en ejecutivo, legislativo y judicial, respetando la autonomía y soberanía de los estados conformantes.
Se vivieron dos etapas de federalismo como gobierno en México, la primera de 1824 a 1835. Guadalupe Victoria estaría al frente del poder ejecutivo, gobernó los cuatro años establecidos en la constitución. Los siguientes gobiernos federalistas se enfrentarían a la presión de los conservadores centralistas que hacia 1835 exponían que el federalismo no era eficiente para hacer frente a los problemas del país y en 1835 vencen instaurando una república centralista.
La segunda etapa federalista mexicana escribe su historia de 1846-1863, las consecuencias políticas, económicas y sociales que el centralismo acarreo, tenían al país en una incertidumbre gubernativa y política. Perdida territorial y la hacienda publica quebrada fue el obstáculo por el cual el federalismo no logro implementar por completo sus ideales, nuevamente, la promulgación de la constitución de 1857 enfrentaría a liberales y conservadores en la llamada guerra de reforma, estos últimos al apoyar la instauración de una monarquía buscarían centralizar el poder, serian anulados políticamente al triunfo de la republica sobre el segundo imperio.
Centralismo
Al centralismo, se le define como el poder concentrado en una sola figura política, esta es la encargada de facto de tomar las decisiones por todos los integrantes de este sistema gubernativo, por tanto, su autonomía y libertades dentro de la unión solo deben estar sujetas a los deseos del gobierno central.
Del centralismo, México vivió dos etapas, la primera de 1835 a 1841, la llamada primera república centralista se instaura derogando la constitución de 1824 y estableciendo las llamadas 7 leyes el 30 de diciembre de 1836 como carta magna de facto, se establecía el gobierno de México como un régimen centralizado en lo administrativo y que esté era representado en el supremo poder conservador. Los estados conformantes de la antigua república federal, se dividieron en departamentos, y los gobiernos de estos quedaron sujetos a el poder central. las separaciones de los estados de la unión en protesta a la instauración del centralismo, dieron como resultado la independencia de Texas y el intento de Yucatán de hacer lo mismo.
La segunda etapa del centralismo se da de 1843 a 1846: el 14 de junio de 1843 se da la promulgación de las bases orgánicas del centralismo, que dejan sin efecto las 7 leyes, el supremo poder conservador da paso a la dictadura, la presidencia tomaba para sí poderes absolutos, el caos gubernativo y económico pasaron factura al perder la guerra con los estados unidos y dentro de esta se vivía una lucha interna entre federalistas y centralistas, prevalecen los primeros instaurando nuevamente la constitución de 1824.
Conclusiones
El federalismo y centralismo lucharon para preservarse aun y a costa del bienestar del país, las pugnas por un modelo y otro, tenían a México debilitado en lo económico y social durante gran parte del siglo 19, de esto se beneficiaron, por ejemplo, potencias como los Estados Unidos. El federalismo ganó sobre el centralismo, al restaurar a la república federal como modelo de gobierno definitivo en 1867.
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